Laura Delgado, finisher de Las 5 Grandes de Zurich: “Correr maratones te da energía para la vida”

En una maratón participan miles de personas y cada una de ellas tiene su historia con sus motivaciones, alegrías y retos.

Laura Delgado Rubio es una de ellas y es la primera finisher de Las 5 Grandes de Zurich, es decir, la primera mujer que ha cruzado las metas de los 42K más importantes de España: Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla y San Sebastián. Representa a las mujeres que se están lanzando a correr en pruebas de fondo que tradicionalmente habían sido cosa de hombres. Pero ya no es así, pues la participación de las mujeres en las maratones aumenta cada año.   

Una corredora ejemplar 

Hemos querido conocer a Laura un poco mejor y nos hemos encontrado con una corredora ejemplar en todos los sentidos. Acaba de cumplir 50 años y corrió su primera maratón en Dublín hace 14 años, aunque corre desde muy joven. Ahora el running forma una parte esencial de su vida junto con sus estudios de Psicología y oposiciones, y el cuidado continuo de su hija autista. Además le encanta viajar, leer, los animales y estar con amigos.  

“Correr me estabiliza mentalmente y me mantiene fuerte físicamente para sobrellevar mi vida familiar. Fue tras los nacimientos de mis hijas cuando me tomé más en serio el running y los entrenamientos se convirtieron en mi rutina diaria”, nos explica Laura. “La enfermedad de mi hija es el mayor obstáculo y la mayor motivación para seguir corriendo”, apunta.   

Entreno metódico 

Laura, que lleva 35 maratones en las piernas, realiza una preparación metódica de cada carrera cuando la familia, el trabajo y los estudios se lo permiten. Entonces entrena cinco o seis días a la semana durante 15 semanas, haciendo más carga las primeras semanas y más velocidad las últimas, con tiradas largas semanalmente. 

Incluye entrenamientos con bicicleta, ejercicios de fuerza y natación. La buena planificación y la constancia le permitieron correr el maratón de Málaga en 3 horas, 8 minutos y 11 segundos, una marca magnífica para una aficionada.  

Carreras y amistades 

Uno de los valores y los placeres del deporte es el compañerismo. Laura lo vive a fondo con su “compañero de maratones”, Carlos Apodaca. Aunque él ahora vive en Logroño y Laura, en Madrid, desde 2010 deciden juntos los retos del año, planifican viajes e, incluso, algún entrenamiento. 

Sin embargo, Laura nos explica que la pandemia del Covid-19 le pasó factura. “Antes de 2020 tenía aspiraciones de mejorar marcas y entrenaba para ello, pero tras el parón me conformo con acabar, y ello repercute en que los entrenamientos no los cumplo a rajatabla y mis marcas han empeorado desde entonces. También hay que tener en cuenta que voy cumpliendo años…”, relata.

14 años de running y 35 maratones 

Más allá de las marcas, con 14 años de runner y 35 maratones, son muchas las experiencias y cientos las anécdotas que ha podido vivir Laura. “Cada maratón es distinta. El clima te puede jugar malas pasadas, desde lluvias torrenciales, granizadas, vientos huracanados, altas temperaturas o mucha humedad pueden ser culpables de que, aunque te hayas preparado a conciencia, no consigas hacer una buena carrera”, explica.  

Otra cosa es que en 2019 en Donosti no pudo correr porque se olvidó las zapatillas y no se dio cuenta hasta que por la noche fue a preparar la ropa para el día siguiente. En 2023 volvió a correr en Donosti y fue la carrera donde al cruzar la meta recibió el brazalete azul de finisher de Las 5 Grandes de Zurich. “Para mí es un honor ser la primera finisher y me encanta la pulsera, ¡la llevo con mucho orgullo!”, nos dice. 

Otra anécdota confirma que el corredor no tiene que hacer experimentos el día de la carrera. En 2011 en Helsinki en 2011, a media carrera se le ocurrió tomar una ampolla de gel con cafeína que no había probado antes y tuvo que entrar en más de diez aseos hasta que llegó a la meta…  

“Cada carrera es una aventura” 

Pero las recompensas que Laura obtiene hacen que todos los sacrificios valgan la pena. “Cada carrera es una aventura y además me permite hacer turismo, algo que me apasiona. La mejor recompensa es atravesar la meta tras el sufrimiento de los últimos kilómetros”, asegura. 

Precisamente el pasado 10 de marzo participó en la maratón de Barcelona por segundo año consecutivo y una de las razones es que le encanta correr por su calles: “Barcelona es una ciudad muy bonita, y recorrerla corriendo es algo que quería repetir. Además siempre hay cosas nuevas que visitar en la ciudad y amigos que ver”. Y por si fuera poco, su compañero de running, Carlos Apodaca, se llevó su título de finisher.   

Laura también recuerda con especial cariño su participación en la maratón de Nueva York en 2014. “Ha sido mi mejor maratón y la corrí junto a un gran amigo, Miguel A. Álvarez Ventosa. Fue un sueño recorrer esa ciudad”, señala.

Siete veces finisher en Madrid  

La Zurich Rock'n'Roll de Madrid, la ciudad donde vive, es la maratón que ha corrido más veces, siete, y destaca que la organización de conciertos musicales por las calles la hacen diferente. Como distinta es la maratón de Sevilla: “La corrí en 2020, el recorrido es rápido, llano y bonito, y visitar Andalucía siempre es un plus. La repetiré seguro”. Sin embargo, la maratón de Valencia, una de las mejores del mundo según los organismos internacionales, reconoce que se le hace cuesta arriba, "porque siempre hay calor y humedad".

Laura anima a todas las corredoras y corredores que se animen a completar una maratón o un Ironman, porque “seguir un plan de entrenamiento durante meses es un trabajo muy duro, pero lo que sientes al cruzar la meta es indescriptible y engancha”.  

Igualmente recomienda completar el reto de Las Cinco Grandes: “Disfrutar estas carreras, visitar estas ciudades de España y conseguir las cinco medallas y la pulsera de finisher de Zurich Seguros es una vivencia muy recomendable; además los entrenos necesarios te ayudan a estar en forma, sana y con energía para la vida”, concluye.