“El impacto de las catástrofes naturales en las empresas es cada vez mayor. Nuestros modelos les ayudan a anticiparse”

Francisco Lisbona (Barcelona, 1972) trabaja en Zurich Seguros desde hace 22 años y cinco meses. Procedía del mundo de la consultoría, pero aceptó el reto de aprender del sector asegurador desde la vertiente comercial. Hoy dirige Zurich Resilience Solutions Spain, una etapa que considera muy estimulante no sólo por la misión, sino por el equipo que le rodea.

Pregunta: ¿Cuál es la esencia de su división?

Respuesta: Zurich Resilience Solutions (ZRS) es en esencia una consultora que cuenta con 1.300 profesionales y presta servicios a la matriz, pero en 2021 se abre la puerta a vender esos servicios también a terceros (clientes, agentes y brokers). Estamos presentes en 40 países y elaboramos unos 155.000 informes de riesgos al año.

P: ¿En qué pilares se apoya ZRS en España?

R: Una de las tres patas son los inspectores de riesgos tradicionales, encargados, por ejemplo, de analizar los daños de una empresa, su riesgo de incendio o la probabilidad de que se registren pérdidas o haya problemas con la cadena de suministro. En España ya hemos asesorado a un centenar de compañías, ofreciéndoles un diagnóstico de cómo están y cómo deberían estar y sugiriéndoles una ruta para priorizar sus inversiones. Este es un servicio de consultoría premium y lo hacemos accesible a pymes que sobre el papel no podrían permitírselo.

P: Se abordan asimismo casuísticas derivadas de las nuevas realidades que rodean a la humanidad.

R: En efecto, la segunda pata de ZRS consiste en prestar al cliente una serie de servicios para que pueda adaptarse al daño físico derivado del cambio climático. El impacto de las catástrofes naturales en las empresas es cada vez mayor. Facilitamos con nuestros informes la elaboración de la memoria no económica y preparamos modelos de impacto a 30, 40 ó 50 años vista que se basan en los distintos escenarios previstos por el IPCC (grupo internacional de expertos sobre el cambio climático).

P: Parece un reto enorme.

R: Lo es. Analizamos infinidad de datos de las compañías y de terceros con modelos propios y un equipo de meteorólogos, físicos y matemáticos que ha diseñado una herramienta muy potente de reporting. Al cliente le damos unos escenarios para su memoria de sostenibilidad y proponemos acciones en cada caso. Recuerdo el episodio de una multinacional alemana fabricante de automóviles de alta gama que se inundaba periódicamente. Lo que hicimos fue implementar medidas de protección y adaptación. Nuestros datos y nuestra herramienta aterrizan así en el mundo real.

P: ¿Y qué papel juega ZRS en el área más tecnológica?

R: Ahí entra en juego la tercera pata, conectada con la ciberseguridad, los ciberataques, el internet de las cosas (IoT) y el impacto de la inteligencia artificial.

P: La velocidad a la que progresa la tecnología es tan llamativa que hasta la Ley de Moore parece quedarse corta.

R: El acceso de los ciberdelincuentes a la IA hará que sus ataques sean más efectivos, sofisticados y amplios. IBM y Verizon alertan de que dos de cada tres pymes han sido hackeadas sin ser capaces de detectarlo. El promedio de tiempo hasta descubrir la vulnerabilidad es de 197 días. No estamos tan lejos de un deep fake que permita al ciberdelincuente hacerse pasar por un directivo que autoriza una transferencia mediante una videollamada de Teams. Por otra parte, al recurrir cada vez a la IA, las empresas aumentarán su vulnerabilidad.

P: ¿Permitirá esta ola de innovación automatizar los peritajes?

R: Ya existen modelos y empresas que nos han mostrado cómo se escanea una fábrica para verla en 3D con tal nivel de detalle que hasta se observan colillas y papeles en el suelo. Por ahí irán los tiros. Pero todavía es importante el contacto físico. Tanto la mediación como el cliente prefieren que sea una persona la que les visite.

P: ¿Cuáles han sido sus proyectos más emblemáticos en España?

R: Con el Ayuntamiento de Madrid desarrollamos parcialmente un modelo para evaluar el impacto de las olas de calor en escuelas con niños vulnerables y tomar medidas de adaptación. También hemos asesorado a un operador logístico internacional con casi todos sus activos ubicados en puertos (áreas muy sensibles al cambio climático). Y trabajamos con cadenas hoteleras que deben decidir si, debido a la subida del nivel del mar, construyen nuevos complejos en los terrenos que habían pensado inicialmente o se retiran más al interior.

P: ¿Qué otros riesgos depararán el futuro?

R: El negocio asegurador y de consultoría crecerá exponencialmente alrededor de la tecnología y se desarrollarán herramientas de IoT para minimizar el riesgo de nuestros clientes. También habrá cambios importantes en la climatología, algunos de ellos irreversibles.