Consejos y secretos para limpiar electrodomésticos blancos

¿Sabías que uno de los principales errores que cometemos en el cuidado doméstico sucede al limpiar los electrodomésticos blancos?

Lo cierto es que todos estos aparatos electrónicos a los que tanto uso les damos se suelen ensuciar mucho. Y requieren también de un tipo diferente de limpieza y puesta a punto. Por eso queremos explicarte cuál es la manera correcta de limpiarlos. Para que tengas la casa perfecta.

¿Cómo limpiar los electrodomésticos blancos?

¿Cuál es el principal problema de limpieza al que pueden verse sometidos estos electrodomésticos? Pues generalmente las manchas amarillentas y la acumulación de grasa. Si hasta ahora solo has utilizado el multiusos es el momento de cambiar de táctica por una más precisa y exacta.

Una solución en spray de un poco de bicarbonato con agua será muy útil para devolverle la neutralidad al aparato. Es decir, sirve tanto para quitar olores como para eliminar las posibles manchas de grasa. Puedes aplicar esta solución con un paño húmedo para frotar.

Y si ya se han empezado a producir las manchas amarillas, basta con utilizar algo de vinagre blanco con agua. Aunque sea oloroso es muy efectivo para quitar la suciedad o incluso la posible cal que haya podido aparecer.

Aquí la frecuencia de limpieza es un factor clave. En este sentido, lo ideal es hacerlo por lo menos cada tres meses. Ahora bien, si les das un uso muy prolongado o si tú mismo notas que están sucios y que necesitan un paño, no esperes y hazlo cuanto antes. Si no, se acumularán los olores y las suciedades.

La nevera

¿Y qué pasa con el frigorífico? Aquí te ofrecemos una solución muy práctica: limpiar la nevera con lejía. La parte exterior (especialmente si es blanca) puedes arreglarla utilizando lo que te hemos explicado más arriba, la solución de agua y bicarbonato. Si es necesario, añade un poco de lejía. Luego, extiende esto por la superficie de la nevera y déjalo reposar unos 10 minutos. Y finalmente retira el líquido que pueda quedar con un paño húmedo. De verdad que parecerá como nueva.

¿Y con la parte de dentro? Muy sencillo, retira los alimentos y las bandejas y limpia toda la superficie con un producto de limpieza adecuado (un multiusos para la cocina, por ejemplo). Eso sí, recuerda eliminar toda la escarcha que pueda haber en la nevera, así como secar luego todo lo que hayas limpiado para evitar que se produzcan humedades. Y si tu nevera ha adquirido un mal olor, puedes utilizar zumo de limón para limpiarla. Eso mejorará mucho su aroma.

La lavadora

No necesitas específicamente productos para limpiar la lavadora. Con lo que tienes en casa es más que suficiente. Principalmente hay dos partes que acumulan suciedad y olores: el tambor y la goma.

Para limpiar el tambor puedes emplear vinagre blanco. Basta con que lo añadas donde echas el detergente y que pongas la lavadora en cualquier programa de lavado de 30º de temperatura. Esto servirá para desinfectar cualquier zona que entre en el proceso de lavado.

La goma, por otro lado, es más complicada. Para ello necesitarás detergente, lejía, un paño, un cepillo de limpieza y unos guantes para no hacerte daño en la piel. Haces una mezcla y frotas hasta eliminar la suciedad. Si ves que esta permanece, deja reposar la lejía y el detergente para que eliminen todo lo que haya quedado incrustado. Lo ideal es limpiar esto una vez al mes.

El lavavajillas

Este es, sin duda, el electrodoméstico más cómodo de limpiar. Sencillamente, tendrás que comprar productos propios de lavavajillas que encontrarás en el supermercado. Contienen detergente y desinfectante para limpiar adecuadamente el electrodoméstico. Eso sí, hazlo sin platos para que quede perfecto también el interior.

Limpiar con lejía, vinagre o bicarbonato

Si estás buscando productos para limpiar electrodomésticos de acero, recuerda que no son necesarios. De hecho, si quieres saber cómo limpiar el acero inoxidable la mejor respuesta serán los productos naturales: generalmente el bicarbonato de sodio mezclado con agua.

También puedes usar vinagre o lejía. De hecho, estos dos productos te sirven para dejar reluciente tu cocina y todos sus electrodomésticos.

¿Es mejor limpiar los electrodomésticos con estropajos?

En general, no. Una bayeta o un paño húmedo son las opciones más adecuadas. Salvo que tengas restos sólidos o manchas duras, el estropajo solo rayará o estropeará el brillo que pueda tener tu cocina. Más que frotar, lo que se necesita es retirar la capa exterior de suciedad que ha quedado adherida. Por lo tanto, es mejor evitarlos.

En definitiva, limpiar electrodomésticos blancos es más sencillo de lo que parece. No vas a necesitar apenas productos especiales y si lo haces con regularidad podrás mantenerlos en buen estado. Y es que existen muchos trucos de limpieza para desinfectar la casa que te serán útiles.