Se espera que la tecnología y la digitalización nos simplifiquen la vida, pero a veces también favorecen una sobrecarga de información y de tareas que se convierte en un problema. El uso excesivo de dispositivos digitales puede reducir el rendimiento laboral y provocar problemas de atención e, incluso, depresión y ansiedad.
Si tienes un pequeño negocio o una empresa familiar, quizás en algún momento te has planteado si puede un familiar ayudar en tu negocio sin estar asegurado.