Bienestar, desconexión, deporte… y tú ¿por qué caminas?

01 jun. 2021

Hace un año empezó la desescalada y pudimos volver a disfrutar de una actividad que muchos habíamos añorado especialmente durante el confinamiento: pasear.

Es una actividad para todas las edades, gratis y puedes realizarla solo o en compañía, sobre asfalto, césped o playa. Un hábito saludable, que se encuentra a medio camino entre un deporte y una actividad social, pero… ¿qué sabemos de nuestros hábitos al caminar? ¿Han cambiado con la pandemia? ¡Pues sigue leyendo!

Hace un año empezó la desescalada y pudimos volver a disfrutar de una actividad que muchos habíamos añorado especialmente durante el confinamiento: pasear.

Es una actividad para todas las edades, gratis y puedes realizarla solo o en compañía, sobre asfalto, césped o playa. Un hábito saludable, que se encuentra a medio camino entre un deporte y una actividad social, pero… ¿qué sabemos de nuestros hábitos al caminar? ¿Han cambiado con la pandemia? ¡Pues sigue leyendo!

Bienestar físico y mental

Ahora llega el buen tiempo y apetece salir a caminar, tomar el aire y también desconectar de tantas horas delante de la pantalla.

Zurich Seguros  ha realizado el primer estudio sobre movilidad activa y los hábitos de caminar, a través de una encuesta a 1.500 personas de todo el país, y nos muestra algunas cifras interesantes, que nos descubren como nos gusta caminar y porqué lo hacemos.

Entre los beneficios que sentimos al practicarlo destacan el bienestar físico (69%), la posibilidad de desconectar (53%), el bienestar mental (48%) y la relajación (47%). Y es que lo beneficios de esta practican son infinitos y muchas veces ayudan a quitarse la pereza y activar nuestro cuerpo, pero también nuestra mente, ya que produce endorfinas y dopamina y mejora tu estado de ánimo…mejorando nuestro deseo sexual, pero también la calidad del sueño, tan importante en nuestro ciclo vital.

El 85% de los encuestados asegura que camina habitualmente, un 20% de los encuestados afirma que camina más ahora que antes de la pandemia. El principal motivo por el que suelen caminar es estar activos (53%), pero resulta interesante descubrir que el 29% señala que caminar les ayuda a pensar. Y es que caminar reduce los niveles de estrés, ya que el corazón bombea más rápido y hace circular más sangre y oxígeno a todos los órganos, incluido el cerebro. Se ha demostrado que durante y después del ejercicio, incluso cuando el esfuerzo es muy suave, las personas se desenvuelven mejor en pruebas que requieren de memoria y atención plena. Además, caminar regularmente promueve nuevas conexiones entre las células cerebrales, retrasa el envejecimiento del cerebro, aumenta el volumen del hipocampo (zona importante para la memoria) y eleva los niveles de moléculas que estimulan el nacimiento de nuevas neuronas y una mejor comunicación en la sinapsis. ¡Todo ventajas!

Deporte social

 Está muy bien eso de salir solo con tu música a hacer deporte, pero a veces la compañía puede ser crucial para acabar con la pereza y que se transforme en una tarea divertida y amena. Y es que los días favoritos para salir a andar son los sábados y domingos, cuando más tiempo compartimos con nuestras familias y amigos.  Y es que, de media, caminamos una hora y media a un ritmo moderado, sobre todo por la ciudad (en 57% de las ocasiones frente al 49% en que lo hacemos por el campo) y dos o tres días a la semana. Definitivamente se trata de una actividad muy social, ya que los datos afirman que la tendencia es hacerlo acompañados, ya que el 69% dejaría de pasear si tuviera que hacerlo solo. ¿Y con quien solemos hacerlo? Nuestros co-caminantes preferidos suelen ser la pareja (32%), la familia (17%) y los amigos (13%).

Equipados de pies a cabeza

Los datos reafirman el aumento de la equipación específica, ya que cada vez existen más gadgets que ayudan a conectarnos con el deporte…casi podríamos decir que nos hemos convertido en unos e-walkers. Entre los que afirman que caminan para hacer deporte, el porcentaje de los que usan equipamiento deportivo sube al 60%. Además de la ropa y el calzado, casi la mitad suele usar dispositivos o aplicaciones para monitorizar sus recorridos. Los dispositivos más utilizados son los smartwatches y las pulseras de actividad, y las aplicaciones más populares incluyen Google Fit, Strava, Runtastic Steps, pero también las que ya están incorporadas en nuestros smartphones.

Da el primer paso

Pero también hay personas que aseguran no caminar nunca, ya sea por falta de tiempo o porque no quieren hacerlo solos. Sin embargo, uno de cada tres se plantearía empezar a caminar regularmente por motivos de salud o si algún amigo o familiar le pidiera acompañarle.

Si estás en esta situación, da el primer paso y busca a esa persona con quien compartir esos paseos, seguro que tienes un lugar agradable para hacerlo, puede ser en la ciudad, en un parque una bonita calle peatonal o hacer una pequeña escapada en los alrededores para disfrutar de la naturaleza, los árboles y el aire fresco… Una buena excusa para compartir charlas, recargaros de energía…si ya lo dijo Machado caminante no hay camino, se hace camino al andar. ¡A por ello!